   Miguel Vargas junto a Guillermo Linares, destacado politico y dirigente de la comunidad dominicana y su hija Mayra, quien le sigue los pasos en la actividad politica.  La Policía ´suspendió la reunión para evitar incidentes. |
NUEVA YORK.- La Policía suspendió una reunión que encabezaría aquí el presidente del PRD, Miguel Vargas, debido a que seguidores del ex mandatario Hipólito Mejía y de Luis Abinader amenazaban con provocar desórdenes.
La reunión tendría lugar este jueves en la noche frente al local del PRD, ubicado en la esquina de la Décima Avenida y la calle 207, del Alto Manhattan.
La Policía actuó debido a que desde prima noche se encontraban allí perredeístas de la referida facción, que amenazaban con boicotear la atividad. Entre estos últimos figuraban los ex coordinadores Julín Mateo y Ernesto Devares, quienes acusaron a Vargas de ser responsable de la derrota del partido en las elecciones del pasado 20 de mayo.
El presidente de la seccional del PRD, Fidel Casilla, agradeció las medidas preventivas que dispuso la Policía.
De su lado, el diputado Rafael Vásquez, presidente de las Seccionales del PRD, dijo que “el boicot a la actividad fue organizado desde Santo Domingo”, por personas a las que calificó de retrógradas.
Dijo que Peggy Cabral viuda del extinto líder perredeísta José Francisco Peña Gómez, debió ser protegía por la Policía de los individuos, que proferían insultos en su contra y amenazaban con agredirla.
Vargas dijo que probablemente el desorden fue motivado por el éxito de su visita, que comenzó con un masivo y entusiasta recibimiento en el Aeropuerto John F. Kennedy, y el éxito de las reuniones que sostuvo toda la tarde del miércoles con unas 9 comisiones de dirigentes de las seccionales de Nueva York, Nueva Jersey, Atlanta, Pensilvannia, Filadelfina, Long Island y otras, además de grupos de movimientos externos integrados por empresarios, profesionales y otros representativos de la comunidad dominicana.
Por su parte, el diputado y comunicador Víctor Casanova consideró que la manifestación no fue un rechazo a Vargas Maldonado, sino el reflejo de las diferencias que se viven en el PRD.
Sobre la acusación de que Vargas es un “traidor”, Gómez Casanova dijo que eso es parte de la política que los perredeístas deben superar. “Si algo le hemos demostrado al país es que ese tipo de contradicciones y confrontaciones que nada suman y creo que ahora lo que se impone es el respeto a la institucionalidad”, expresó.
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